Antigua Universidad

El patio o claustro está formado por una doble arcada con arcos de medio punto sobre delgadas columnas toscanas. Frente a la puerta de entrada se abre paso la escalera y bajo ella se haya la antigua cárcel de los estudiantes. Adosado a una de las paredes del claustro se encuentra un relieve en bronce que homenajea a Antonio Machado.
El paraninfo se encuentra al fondo del patio. De planta cuadrada, cuenta con un graderío de madera y sus paredes están decorados con valiosos cuadros de sus fundadores: el clérigo Rodrigo López, San Juan de Ávila y de uno de sus aventajados discípulos Diego Pérez de Valdivia.
Se completa este conjunto con la capilla de San Juan Evangelista terminada a principios del siglo XVII y que consta de una sola nave con bóveda de medio cañón. La fachada principal forma un solo cuerpo con el edificio principal y se aprecian los escudos del fundador. La puerta principal da al sur tiene una traza sobria y elegante con su arco de medio punto y columnas corintias. En el interior destaca una pequeña capilla dedicada a Fernández de Córdoba y otras dos capillitas de estilo manierista enfrentadas en el centro de la nave. La torre se divide en dos cuerpos, uno cuadrado y otro octogonal en la parte superior, y los huecos de las campanas son arcos de medio punto.
A lo largo de su historia, por la Universidad de Baeza han pasado profesores de gran prestigio, como el religioso y escritor Juan de Ávila o el historiador Jaime Vicens Vives. Pero su docente más ilustre fue el poeta Antonio Machado, aunque cierto es que cuando llegó a la ciudad, la universidad ya no era tal, sino un centro de Enseñanza Secundaria. Machado impartió clases de francés desde 1912, poco después de que falleciese su esposa Leonor. Actualmente, el aula en la que ejerció el autor de Campos de Castilla es un pequeño museo abierto al público, con su mobiliario original y numerosos documentos del poeta.

A través del Espacio Expositivo de Antonio Machado y la Educación de su Tiempo, la ciudad de Baeza rinde homenaje una vez más a esta figura universal, presentándola con una perspectiva entrañable e innovadora. El gran poeta sevillano siempre mantuvo un vínculo muy especial con la ciudad, siendo un asiduo de las tertulias de La Robótica y socio del Nuevo Casino. Aquí también escribió una parte importante de su obra. Pero, además, Baeza cuenta con una serie de “lugares machadianos”, espacios vinculados al poeta como son la casa en la calle Gaspar Becerra, el Hotel Comercio, la farmacia de Don Adolfo Almazán, el Paseo de las Murallas, la Encina Negra, el Casino de Artesanos, la Plaza de Santa María, la Catedral y numerosos elementos y espacios conmemorativos.
A través de este espacio expositivo, el público se acerca a diferentes aspectos y singularidades de la época en la que vivió Machado, definiendo cuestiones históricas, sociales, culturales o económicas. Los paneles expositivos se dividen en tres bloques temáticos fundamentales. El primero hace alusión a la Baeza en la que vivió Machado y a su forma de vida aquí. El segundo hace referencia a la quizá menos conocida faceta de Machado como maestro, que se une a la de poeta por todos conocida. Y el tercer bloque temático se centra en el propio espacio que alberga este proyecto, un maravilloso edificio manierista que fue sede de la Antigua Universidad de Baeza, fundada en el siglo XVI. Además, el espacio cuenta con juegos interactivos y elementos audiovisuales para aprender de manera divertida y conocer más sobre Baeza y Antonio Machado.